Nuevo año para Colo Colo,
nuevo campeonato, objetivos e incluso camiseta, pero que comenzaron de muy mala
forma.
El estadio Monumental
recibía una gran cantidad de público principalmente por el redebut de Humberto
Suazo. Era que no, si un goleador de raza como él, atrae a un gran número de
espectadores. Pero había más sorpresas en Macul, como la ausencia de Paredes,
Flores y Toro que no aparecían ni en la banca, sumado a Vecchio que se perdía
el encuentro por acumulación de tarjetas amarillas.
Desde un principio vi un
equipo predecible, que buscaba siempre por las bandas pero con poca
profundidad, lo que dio como resultado que San Marcos leyera rápidamente el
partido y tapara el ataque albo.
Y es que las ausencias se
sienten de inmediato, puesto que en varios casos se produce un efecto domino.
Me explico, por ejemplo ante la ausencia de Vecchio, Pajarito Valdés tuvo que
asumir el papel de enganche, un puesto en donde no desarrolla a plenitud su
buen fútbol, el cual se da viniendo desde atrás con más metros a recorrer.
Lo mismo sucede con Suazo,
quién además de estar adaptándose al equipo, no juega solo entre los centrales
rivales. Es más, los últimos partidos que le vi en Monterrey, jugaba de media
punta atrás de un centro delantero. Al estar solo en ataque, se le hacía fácil
la tarea a la defensa de Arica.
Pero donde más se sintió la
ausencia, fue en defensa. Julio Barroso además de ser un gran jugador, el mejor
defensa del fútbol chileno, hace jugar bien al resto. Lamentablemente recién
empezó a cumplir su castigo y hay que buscarle una vuelta a la última línea
porque Vilches jugo muy mal. Perdió fácilmente cinco pelotas en la salida –a
raíz de una de esas, surgió el único gol del partido-, cometió faltas y estuvo
poco fino en la marca, al igual que Beausejour. Increíble como solo un jugador
puede trascender tanto en el campo de juego.
Por fortuna tenemos a Justo
Villar en portería, un hombre que te da una seguridad impagable. Gracias a él
no se recibieron más goles, aunque si no hubiese intervenido en la jugada de
gol, quizás esa pelota se iba por la línea de fondo, pero bueno, son cosas del fútbol.
Queda un cupo para reforzar
el equipo en el torneo local. Dicen que hay un principio de acuerdo con Martín
Rodríguez, otros que las negociaciones van avanzadas con Frickson Erazo (Recalaría en Gremio de Brasil).
Personalmente considero que la llegada de un central es primordial y más que necesaria. Rodríguez lo encuentro un muy
buen jugador, con gran futuro, pero que bajo las circunstancias que se dan no
lo encuentro primordial. Ahora bien, si está dispuesto a jugar solo la copa,
bienvenido sea.
El próximo domingo
volveremos a ver a nuestro equipo, jugando de visita en Copiapó contra Deportes
Iquique, cosas que se dan solo en Chile. Viendo el vaso medio lleno, será una
gran oportunidad para los hinches de aquella ciudad de ver al Popular, pero lo único que crítico es el horario, porque jugar
a las 16.30 hrs es algo que daña el espectáculo.
Tengo la certeza de que el
equipo mejorará para la próxima fecha, pero me sigue dando vuelta el puesto del
centro. Creo que ahí es donde encuentro el único pero en el plantel. Queda por
ver durante la semana quién llega, la posible formación y esperar para ver
nuevamente a nuestro Colo Colo, que de seguro dejará una mejor imagen en
cancha.
Por Ignacio Ramírez |
@iramirezmorales
Foto: Gentileza
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